Conducir es una actividad exigente y cambiante, por ende,
potencialmente estresante.
SEVILLA. Garrido Manuel
Conducir es una acción compleja que nos exige mucho más
de lo que parece. Involucra al conductor psicológica y físicamente. Requiere de
concentración y un estado de alerta y atención permanentes. Por ello, el logro
de un desempeño correcto depende, no sólo de las habilidades adquiridas por el
conductor para dominar su vehículo en todo tiempo y circunstancia, y del
adecuado estado físico para poder percibir adecuadamente las situaciones del
camino, sino que también depende de la experiencia, de la clara conciencia de
los riesgos de moverse en el sistema del tránsito, y de la madurez y equilibrio
emocionales, que harán posible el desarrollo de actitudes y comportamientos
seguros.
Un conductor estresado no está en las mejores condiciones para conducir con seguridad ya que las exigencias del tránsito lo sobrepasarán fácilmente, amentando significativamente la tensión y el malestar interior.
Un conductor estresado no está en las mejores condiciones para conducir con seguridad ya que las exigencias del tránsito lo sobrepasarán fácilmente, amentando significativamente la tensión y el malestar interior.
ESCUCHEN AL PROFESOR GARRIDO:
Un conductor estresado es un conductor en riesgo
Cada dificultad en el camino (un embotellamiento en el
tránsito, el auto que lo antecede circulando a menor velocidad, alguien que lo
molesta con sus luces, el semáforo en rojo, cambios en el estado del camino,
etc.) será causa de excesiva tensión y ansiedad con desencadenamiento de
respuestas de riesgo de tipo erráticas y/ agresivas (conducción a excesiva
velocidad, sobrepasos y cambios de carril permanentes, conducción encimada al
vehículo que va adelante, maniobras bruscas y no avisadas, equivocaciones por
distracción, indecisión frente a un imprevisto, etc.). Todas las situaciones
descriptas son potenciales generadoras de incidentes que derivarán, en muchos
casos, en accidentes.
Entonces, teniendo en cuenta las dificultades de la vida
de hoy, con mucha gente sufriendo un estado continuo de tensión y exceso de
preocupaciones, ¿qué puede hacerse para disminuir el estrés al conducir?
Algunos consejos para reducir el estrés al conducir
- Primeramente, ser conciente del estado en que se
encuentra. Si usted sabe que está atravesando un momento emocionalmente
difícil, si está sufriendo algunos de los síntomas que se detallan más arriba,
habrá que extremar las medidas de seguridad al conducir o bien, en situaciones
límite, evitar conducir.
- Planifique cada viaje dándole más tiempo del estimado
necesario para ese recorrido. De esta manera evitará la ansiedad frente a
demoras o inconvenientes en el camino. Si va a emprender un viaje prolongado,
estime al menos una hora o más de tiempo para imprevistos y no se autoimponga
una hora precisa para llegar. Si el viaje es corto, procure salir con varios
minutos de antelación.
- Disminuya la velocidad y adécuela a las circunstancias
del camino, del flujo de tránsito y al estado emocional. Está comprobado que a
mayor velocidad de circulación, mayor tensión. Por eso, para distenderse es
bueno buscar una velocidad en la que se siente que se circula más relajado. Por
otra parte, al circular más despacio se tiene más tiempo para reaccionar ante
un imprevisto o corregir una maniobra equivocada.
- Acepte las circunstancias del tránsito. Esto significa
que frente a un embotellamiento, obstrucción, semáforos mal coordinados, flujo
de tránsito lentificado, etc, hay que procurar calmarse y no intentar forzar la
velocidad de marcha apurando a los otros, violando normas o zigzagueando;
pensar que la salud y la seguridad están en juego. Si es necesario, realice
ejercicios respiratorios de relajación por medio de inspiración profunda con
exhalación lenta. Puede ayudarse escuchando una música agradable y relajante.
- Frente a un conductor torpe, lento y/o agresivo, no se
enganche. Procure evitarlo, según el caso, cediéndole el paso, o sobrepasándolo
con precaución y ponga distancia de él. Piense que su salud y seguridad son su
prioridad.
- Evite discutir con los acompañantes de viaje sobre
temas conflictivos.
- No atienda el teléfono celular mientras conduce, es
fuente de distracción y sumador de tensiones.
- Descanse un mínimo de 7 u 8 horas cada noche. La
mayoría de las personas necesitan ese tiempo de sueño para funcionar bien
durante el día. Procure tener los mismos horarios para su descanso, de manera
de ayudar al funcionamiento de su organismo. Si padece de insomnio o se
despierta varias veces en la noche pida ayuda profesional. Un conductor
fatigado es un conductor disminuido en su capacidad de conducir.
- Evite el consumo de alcohol y /u otras drogas desde
horas antes de conducir ya que alteran su rendimiento, percepción y capacidad
de respuesta al conducir.
- Si viaja con niños a cargo, procure que viajen
entretenidos y con los cinturones de seguridad colocados.