Los únicos sistemas de conducción autónoma SAE L3 homologados para su uso en la vía pública son los de Mercedes-Benz (Drive Pilot, en Alemania y EE. UU) y Honda (“Traffic-Jam Pilot”, en Japón). Ambos emplean redundancia de sensores, con cámaras, LiDAR y radares.
Los fabricantes chinos han realizado una decidida apuesta decidida por los sensores LiDAR y ya disponen de un elevado número de modelos con esta tecnología y de muchos proveedores.
Tesla sigue apostando por su tecnología FSD, un sistema basado exclusivamente en cámaras e inteligencia artificial, para alcanzar los niveles 3 y 4 de conducción autónoma.
Las normativas de seguridad funcional y de la UNECE* no obligan a incorporar LiDAR, pero sí habla de redundancia de sensores y de que el sistema tenga un rendimiento adecuado en todas las condiciones.
El sistema basado únicamente en cámaras e IA de Tesla es más sencillo, requiere de menos potencia de cálculo, cableado y consumo de energía; y nunca se enfrenta a una potencial discrepancia de sensores.