En una jornada de pruebas en el circuito Hakka Ring, en Toledo, los cinco modelos MINI John Cooper Works han hecho su puesta en escena de la única manera posible: Con la diversión al volante y experiencia de conducción inconfundibles por bandera, fieles a su origen.
Herencia en la competición, generación tras generación.
Desde 1961, año en el que John Cooper decidió potenciar el pequeño Mini clásico diseñado por Alec Issigonis, mostrando una visión muy clara sobre cómo aprovechar las virtudes de un vehículo pequeño y ligero sobre sus competidores, hasta los éxitos cosechados por el prototipo basado en el nuevo MINI John Cooper Works en las 24 horas de Nürburgring, con su nieto Charlie Cooper a los mandos, John Cooper Works ha representado toda una declaración de intenciones en el mundo de la competición.