
Un equipo de 150 personas trabajó en el nuevo y apasionante anuncio, con el rodaje que tuvo lugar en la sede de Porsche en Zuffenhausen y sus alrededores, a finales de noviembre de 2019. Es la segunda vez en la historia de la compañía que se ha producido un anuncio para la Super Bowl y ahora el fabricante de coches deportivos muestra cómo se llevó a cabo este extraordinario proyecto.