Una regla de oro es no poner la información en
mayúsculas, ya que reduce la velocidad de lectura un 12 %.
En cuanto a los colores, es preferible el clásico negro
sobre blanco –o amarillo–, aunque dicha blancura puede ser demasiado agresiva
para la vista. Por ello, muchas veces se opta por fondo azul o verde y
caracteres claros.
Suele considerarse a los británicos Jock Kinneir y
Margaret Calvert como los padres de la señalización moderna en las carreteras.
Ellos crearon a finales de los 50 el tipo de letra
Transport, utilizado en muchas autopistas del mundo.