sábado, 13 de julio de 2024

LA ROTONDA

 

A LA ORILLA DEL MAR

 




Entre Dana y Dana, los termómetros se disparan, y no hay nada mejor en verano que esperar que pase la vida a la orilla del mar.

La canícula es el periodo más caluroso del verano, generalmente comprendido entre julio y agosto, y es conocida por sus altas temperaturas y días prolongados de sol intenso. Este fenómeno se siente especialmente en las zonas costeras, donde el calor y la humedad pueden ser abrumadores. Sin embargo, la orilla del mar ofrece una serie de ventajas y actividades que permiten sobrellevar mejor esta época del año.

Durante la canícula, las temperaturas pueden superar los 35°C en muchas regiones. Esto es consecuencia de la alta incidencia solar y la estabilidad atmosférica que impide la formación de nubes y lluvias.

En las áreas costeras, la humedad relativa del aire suele ser alta, lo que intensifica la sensación térmica. El calor húmedo puede resultar más incómodo que el seco, ya que dificulta la evaporación del sudor y, por ende, la capacidad del cuerpo para refrescarse.

La radiación ultravioleta (UV) alcanza niveles muy altos durante estos días, aumentando el riesgo de quemaduras solares y otros daños a la piel.

Cómo Aprovechar la Orilla del Mar Durante la Canícula

Una de las mejores formas de combatir el calor es disfrutar del mar. Nadar, practicar snorkel o simplemente chapotear en el agua proporciona un alivio inmediato del calor.

La brisa que sopla desde el mar puede ser refrescante y ayudar a mitigar la sensación de calor, especialmente durante las horas más calurosas del día.

Aprovechar las primeras horas de la mañana o las últimas de la tarde para realizar actividades al aire libre es recomendable. Durante estos periodos, las temperaturas son más moderadas y el sol menos intenso.

Es crucial utilizar protector solar de amplio espectro y aplicarlo generosamente, además de usar sombreros, gafas de sol y ropa ligera que cubra la piel para evitar quemaduras y otros daños causados por la radiación UV.

Beber abundante agua es fundamental para mantenerse hidratado en condiciones de calor extremo. Los jugos naturales y las bebidas isotónicas también pueden ser útiles para reponer electrolitos.

Buscar la sombra bajo las palmeras, sombrillas o toldos puede proporcionar un descanso necesario del sol directo.

La orilla del mar durante la canícula ofrece un escape refrescante del calor abrasador, pero también exige precauciones específicas para disfrutar de manera segura. La hidratación constante, la protección solar y la planificación adecuada de las actividades pueden garantizar que la experiencia sea agradable y saludable.

En conclusión, la canícula del verano, aunque desafiante por sus altas temperaturas, puede ser disfrutada a la orilla del mar con las precauciones adecuadas. La combinación del agua refrescante, la brisa marina y la belleza natural del entorno costero crea un escenario ideal para sobrellevar los días más calurosos del año.

Con afecto, y respeto,

Pepe Bejarano
todomotornews@gmail.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Solo comentarios relacionados con la información de la página.