EL MINERO
Sus pulmones respiraban con dificultad. Los cupríferos
le habían dañado de cierta gravedad las vías respiratorias. Su rostro arrugado
le daba una apariencia de incipiente vejez que no se correspondía con su fecha
de nacimiento. La vida lo había tratado mal. Podríamos decir, sin pecar un
ápice de exagerados, que la madre naturaleza había sido algo cicatera con su
persona… Había trabajado con una inusitada dureza… Pero a grandes males,
grandes remedios.
Cuando, por prescripción médica, cambió su residencia
a un pueblo de la campiña, sintió que se quitaba una pesada carga de sus
maltrechos hombros. Los nuevos vecinos lo llamaban con respeto: “El Minero”, y
le abrieron las puertas de sus nobles corazones, forjados en los trabajos del
terruño. Atrás, quedaba la pesadumbre del aire contaminado que se respiraba, no
solamente en las minas, sino en todas las viviendas colindantes.
Su nueva casa era reducida, pero tenía un pequeño
corral que le permitía plantar algunas hortalizas, regadas por unas diminutas
acequias, más bien cicoletas, que él había dibujado con un viejo escardillo. Muchas
veces, al atardecer, abría el cierro acristalado que daba al reducido huerto, y
lo contemplaba con el orgullo que siente el pintor cuando mira sus cuadros. El
limpio aire del lugar proporcionaba a su respiración un sosiego que se podía
percibir en sus facciones. Parecía que había rejuvenecido. En la lejanía, podía
divisar un puzle de pequeños sembrados. Los cidros, que mostraban sus frutos
con espléndida madurez, destacaban como si fuesen cetáceos que saltaran entre
las olas del mar…
En la última cita con el doctor, el galeno casi no lo
reconoció. Se miraron fijamente, estrecharon sus manos, y los dos sonrieron con
mesurada satisfacción.
El día 23 de septiembre de 2017 escribí mi primer
artículo en TODOMOTORNOTICIAS.COM a petición del director de la revista, Pepe
Bejarano. Como pueden comprobar, han transcurrido casi seis años desde esa
fecha. Durante ese tiempo, he escrito 140 artículos. Hasta julio de 2021, los
escritos tenían una estrecha vinculación con el mundo del motor y la
Circulación Vial, pero la dirección de la revista decidió cambiar esa línea,
para que los contenidos de los textos pudiesen trata temas diversos: política,
educación, relatos costumbristas… Con una u otra tendencia, he intentado
hacerlo lo mejor posible, he labrado una bonita amistad con Pepe y me ha
servido para exponer mis ideas a los lectores. Pero todo en la vida tiene un
final y he decidido, previa consulta con el dueño y director, dar por terminada
mi colaboración en la revista.
Muchas gracias, estimados lectores, por leer mis
ocurrencias y por el apoyo recibido.
Con el habitual, saludos cordiales, me despido de
ustedes.
Fernando Monge
30/julio/2023
fmongef@gamail.com
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