PEUGEOT es una marca de referencia en tecnología. Prácticamente toda su gama cuenta con innovaciones que introducen a sus vehículos en la conducción autónoma de nivel 2.
Con el puesto de conducción PEUGEOT i-Cockpit® como puente de mando, los equipamientos innovadores desarrollados por la marca refuerzan la seguridad al volante ocupándose de tareas tan diversas como las maniobras de estacionamiento, la distancia de seguridad en autopista, o la prevención de colisiones.
La gama PEUGEOT se anticipa a las características novedosas que marcarán la conducción en los próximos años. Sin ir más lejos, la función Drive Assist abre la puerta a una conducción semi-autónoma en autopista y vías rápidas gracias, que combina la ayuda al mantenimiento activo de carril, asociado al Lane Position Assist (LPA). Está presente, entre otros, en los Nuevos PEUGEOT 208, 2008 y 308, en los SUV 3008 y 5008 y en los PEUGEOT 508 y 508 SW.
Una cámara situada en la parte alta del parabrisas reconoce las líneas continuas o discontinuas al circular por carretera y puede detectar cuándo se están cruzando involuntariamente. Este equipamiento es la base de la alerta de cambio involuntario de carril, que emite una alerta sonora y visual en caso de falta de atención del conductor a una velocidad que supere los 80 Km/h.
Además, si se circula a una velocidad entre 65 Km/h y 180 Km/h, la dirección actúa progresivamente para mantener el vehículo en su carril inicial. Si se desea mantener la trayectoria de su vehículo, el conductor puede impedir la activación del sistema sujetando firmemente el volante (por ejemplo, si se está esquivando un obstáculo). La corrección automática se interrumpe en cuanto se accionan los intermitentes
El Lane Position Assist (LPA) mantiene la posición del vehículo, elegida por el conductor, en la vía de circulación. Por su parte, el regulador de velocidad adaptativo con función Stop & Go cuenta con instrucciones ajustables de distancia de seguridad y, en medio de un atasco, asegura el arranque automático del vehículo en paradas de menos de 3 segundos.
Para reforzar aún más la seguridad, la gama PEUGEOT cuenta con la función Distance Alert (alerta de riesgo de colisión), que detecta los automóviles que están parados o circulan en el mismo sentido de la circulación, además de los peatones presentes en la calzada. Avisa al conductor si su vehículo se acerca demasiado y corre el riesgo de colisionar con ellos. Este dispositivo se complementa con un sistema de frenado automático de emergencia de última generación (Active Safety Brake), capaz de detectar peatones y ciclistas, de día o de noche, en un amplio rango de velocidades: entre 5 Km/h y 140 Km/h.
Un radar implantado en el centro del paragolpes delantero con un alcance máximo de 150 metros permite, a través del regulador de velocidad activo, asegurar dos funciones: mantener automáticamente la velocidad del vehículo en el valor programado por el conductor y adaptar la velocidad del vehículo a la del que le precede, con la ayuda del freno motor y del sistema de frenado. Si el vehículo precedente circula a una velocidad más lenta, el sistema ralentiza, o incluso detiene, el automóvil para regular la distancia de seguridad con la función Stop. Una innovación que ayuda a reducir drásticamente las colisiones por alcance
Aparcar en ciudad puede llegar a ser todo un arte. La función Park Assist permite enfrentarse a estas maniobras como todo un profesional gracias a, que maneja automáticamente la dirección y, en versiones con caja automática EAT8, los cambios de marchas, para asegurar un estacionamiento óptimo y sin sobresaltos.
Presente en los PEUGEOT 508 y 508 SW, el sistema de visión nocturna (Night Vision) dispone de una cámara de infrarrojos que permite la detección de seres vivos ante el vehículo de noche o en malas condiciones de visibilidad. Un plus en recorridos nocturnos por zonas mal iluminadas. El sistema garantiza la detección a una distancia de hasta 200-250 m, más allá del alcance de las luces de carretera, con una visualización central de la visión de infrarrojos en el cuadro de instrumentos digital, dentro del campo de visión del conductor.
Pensada para trayectos largos como los que caracterizan a las vacaciones de verano, la alerta de tiempo de conducción se activa al detectar que el conductor ha pasado dos horas seguidas al volante a una velocidad superior a 65 Km/h. Esta alerta se traduce en la visualización de un mensaje, acompañado de una señal sonora, que anima a hacer un descanso.
También útil en recorridos por carretera, el sistema de reconocimiento de señales de limitación de velocidad permite detectar y leer los indicadores de velocidad y mostrarlos en el cuadro de instrumentos. Este dispositivo también tiene en cuenta las informaciones sobre límite de velocidad que llegan a través de la cartografía del navegador. Esta tecnología se completa con la recomendación de límite de velocidad: el conductor puede elegir adaptar el límite de velocidad del vehículo al de la señal de tráfico leída por la cámara pulsando en el botón "MEM" del mando del limitador/regulador de velocidad.
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