La gama Ford Vignale con
tracción total es uno de los atractivos más innovadores de la temporada de
esquí en la Estación Invernal de Astún gracias al programa Ford Snow Driving.
Una pista elíptica en el Prado Blanco de Astún, a 2.000 metros de altitud, en una
zona ubicada en el corazón de las pistas, es el escenario elegido para este
exclusivo programa de conducción invernal.
La actividad, disponible durante
toda la temporada de esquí, comienza desde una zona de reunión delimitada en la
estación de Astún y concluye en el espectacular Iglú Vignale, con vistas
privilegiadas de un entorno único.
La experiencia cuenta con dos partes: una
teórica, y una práctica. En la primera se explican diferentes técnicas de
conducción en nieve y cómo aplicarlas en el circuito Ford Snow Driving. En la
segunda, de 30 minutos de duración, los usuarios podrán disfrutar de la
experiencia de conducir el Ford Vignale 4x4 de su elección en un espectacular
entorno controlado acompañados de un monitor especializado.
En la parte práctica,
se practicarán técnicas de conducción segura sobre nieve y hielo, así como
slaloms, control de deslizamiento en curva, frenada, etc.
Los modelos disponibles son el Ford Kuga
Vignale, el Ford Edge Vignale, el Ford Mondeo Vignale y el Ford S-MAX Vignale.
Los cursos se celebran los fines de semana en siete turnos a partir de las
09:45 de la mañana, con un límite de 28 participantes al día (cuatro por
turno). El precio de la experiencia es de 25 € y se puede gestionar en
www.reservasastun.com/fordsnowdriving.
La adquisición del curso de conducción
en nieve de Ford no incluye el forfait de acceso a las pistas para realizar la
actividad y el usuario debe estar en posesión de un carnet de conducir con
fecha válida en vigor. Ford Snow Driving supone una oportunidad única para
poner a prueba el sistema de Tracción Total Inteligente de Ford en un entorno
único.
El sistema de Ford proporciona una transición perfecta de par entre las
cuatro ruedas, haciendo posible una pisada más firme en la carretera,
especialmente en terrenos resbaladizos. El sistema de Tracción Total
Inteligente monitoriza el agarre de las ruedas del coche en la superficie de la
carretera y puede ajustar el reparto de par hasta el 50/50 entre las ruedas
delanteras y traseras en menos de 20 milisegundos, veinte veces más rápido de
lo que se tarda en parpadear. Además, al ofrecer el par sólo donde y cuando se
necesita, el sistema de Tracción Total Inteligente tiene un impacto mínimo en
los consumos y emisiones de CO2 comparado con los sistemas de tracción total
permanentes.
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