Ford ha puesto
en marcha tres campañas de revisión de vehículos en Norteamérica que afectarán
a más de 113.000 unidades de las marcas Ford y Lincoln por problemas con la
inyección de combustible y con una ventanilla.
Según
informó la compañía, la primera de las campañas de revisión que llevará a cabo
afectará a 88.151 unidades en Estados Unidos, Canadá y México de los modelos
Ford Taurus y Flex y de los Lincoln MKS y MKT, todos ellos fabricados entre
2012 y 2015, a causa de un problema con la bomba de combustible.
Estos
modelos, equipados con un motor de gasolina de 3.5 litros, podrían experimentar
de forma eventual un fallo en el módulo de control de la bomba de combustible,
lo que podría provocar que el motor no arranque o que se cale en algunas
ocasiones.
Por otro
lado, la firma del óvalo también revisará 2.472 unidades del vehículo comercial
Ford Transit, fabricadas entre 2014 y 2016 y equipadas con un propulsor diésel
de 3.2 litros, a causa de un posible funcionamiento inadecuado de la bomba de
inyección del combustible.
Asimismo,
Ford también pondrá en marcha una campaña de satisfacción de cliente, a través
de la que llamará a revisión 23.150 unidades del Ford Escape de entre octubre
de 2015 y mayo de 2016, con el fin de actualizar el software de las
ventanillas, ya que podrían cerrarse con demasiada fuerza.
La
compañía explicó que se pondrá en contacto con los clientes afectados por estas
medidas y resaltó que los concesionarios oficiales de la compañía los reparará
sin coste alguno. Además, afirmó que no ha tenido constancia de que dichos
problemas hayan ocasionado ninguna lesión o accidente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Solo comentarios relacionados con la información de la página.