martes, 3 de julio de 2012

Cada concesionario español vendió una media de 50 coches en el primer semestre, según Aniacam


De mantenerse los actuales niveles de matriculaciones, el 25% de la red de concesionarios en España cerrará en 2012.

Cada concesionario español vendió una media de cincuenta automóviles en los seis primeros meses del presente ejercicio, según estimaciones de la Asociación Nacional de Importadores de Automóviles, Camiones, Autobuses y Motocicletas (Aniacam), que señaló que de mantenerse los actuales niveles de matriculaciones, el 25% de la red de concesionarios en España cerrará durante el presente ejercicio.

El presidente de Aniacam, Germán López Madrid, aseguró que la demanda actual de automóviles en España es "prácticamente inexistente", si bien indicó que las cifras del mes de junio han sido negativas aunque podían haber sido peores.

López Madrid indicó que los tres últimos días del mes se matricula un 30% del total de las ventas del mes y resaltó que las automatriculaciones de kilómetro 0 suponen el 40% del total de las entregas. "Casi el 60% de lo que se ha matriculado a lo largo del año en España se ha hecho a compañías de rent a car y a empresas", aseguró.

"Con una media de cincuenta coches por concesionario en los últimos seis meses, la rentabilidad de los puntos de venta se hace inviable y aproximadamente un 25% de ellos cerrará a lo largo del año 2012", añadió.

Además, en relación con las previsiones macroeconómicas para España, López Madrid indicó que su estimación es que en 2014, año que se prevé volver al crecimiento, la red de concesionarios que logre sobrevivir representará el 60% del total que existía en 2008.

Para ese mismo año, el presidente de Aniacam vaticina que el 50% de los vehículos que circulen por España tendrán más de diez años, lo que supondrá un incremento de las emisiones a la atmósfera y un deterioro de la seguridad vial.

"Esto se debe a que no sólo aumenta el número de vehículos más viejos sino que además, dada la caída de visitas al taller, están peor mantenidos y la unión de una baja revisión con una mayor antigüedad del automóvil es la peor combinación que puede darse para las seguridad de nuestros ciudadanos en las carreteras españolas", añadió.

Por todo ello, solicitó la puesta en marcha de un plan de rejuvenecimiento del parque automovilístico español, que mejoraría la seguridad vial y el impacto negativo sobre el medio ambiente y también supondría un aumento de los ingresos netos del Estado.

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