La
utilización del teléfono móvil al volante se ha convertido en la primera causa
de accidente por distracción, según el último informe "Distracciones,
Telefonía Móvil y Seguridad Vial", realizado por el Race y Windows Phone.
Para
llegar a esta conclusión, el estudio se apoya en las denuncias tramitadas por
los agentes de tráfico por hablar por el teléfono móvil mientras se conduce,
que ascendieron a 125.964 en 2011, según datos provisionales de la DGT.
A
pesar de que los autores del estudio señalaron las dificultades para conocer la
incidencia real del uso de los teléfonos móviles al volante, el alto número de
denuncias presentadas por este motivo ( que ya de por sí es difícil de
controlar mediante sanciones) refleja que un número importante de conductores
utiliza el teléfono mientras conduce, lo que supone un importante elemento de
distracción.
Las
distracciones siguen siendo las principales causas de accidentes mortales en
carretera (y van en aumento en seis comunidades), por delante de la conducción
a una velocidad inadecuada, el no respetar las normas de tráfico, la fatiga o
el consumo de alcohol u otras drogas.
Por
estos motivos, las ejecutoras del estuido abogan por introducir nuevos análisis
y sistemas de recogida de datos para avanzar en este campo, en el que se dan
importantes diferencias estadísticas entre las comunidades autónomas.
