La agencia de calificación crediticia Moody's ha situado
bajo revisión el rating de PSA Peugeot-Citroën para una rebaja, después de que
la corporación francesa anunciara este jueves el cierre de una fábrica en
Francia y la supresión de 6.500 empleos.
Moody's explica que ha tomado esta decisión por el
deterioro de distintos parámetros operacionales de PSA, como la caída de la
tasa de utilización de sus fábricas, la reducción de su posición de liquidez en
200 millones mensuales o las pérdidas operativas de 700 millones que espera
para el cierre del primer semestre.
La agencia sostiene que PSA está sujeta a un
"tremendo estrés operacional", al tiempo que cuestiona que la alianza
con General Motors, propietario del 7% de las acciones del grupo galo,
proporcione ahorros a corto plazo.
El rating asignado actualmente por Moody's a PSA
Peugeot-Citroën es Ba1, el nivel máximo dentro del grado especulativo, conocido
también como 'bono basura'.