1. Eficiencia y placer de
conducción: los innovadores motores en V de Audi
Los motores en V de la marca
de los cuatro aros existen desde hace 29 años. El V8 de 3,6 litros debutó en el
Audi V8 en 1988, al que siguió dos años más tarde un V6 de 2,8 litros en el
Audi 100. El verdadero despegue se produjo en la década de los ’90: en 1997
apareció el 2.5 TDI, primer turbodiésel del mundo con seis cilindros en V,
seguido en 1998 del V8 TDI, con una cilindrada de 3,3 litros. Y el V6 biturbo
de 2,7 litros presentado en el año 2000 fue muy especial: con una potencia de
279 kW (380 CV) y 440 Nm de par máximo, impulsaba al Audi RS 4 Avant hasta un
nivel desconocido en la categoría.