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sábado, 30 de noviembre de 2024

LA ROTONDA

 

GASTAR O NO GASTAR






Entramos en una época donde el gasto se dispara, es una especie de impulso que nos hace más felices mientras compramos, pero cuando vemos lo que tenemos y lo poco que hemos ahorrado, entramos en modo de frustración.

Por lo visto, gastar genera una sensación de recompensa inmediata. Y esto, también tiene algo de químico en nuestro cuerpo. La dopamina se dispara siempre que adquirimos algo deseado.

Además de este procedimiento químico que se genera en nuestro cerebro, el hecho de gastar está relacionado con la búsqueda de éxito o aprobación social. No se han dado cuenta, que les apetece realizar compras cuando no se encuentran bien, están tristes, o estresados, o la ansiedad deambula por su vida. Y todo se viene arriba cuando llegamos a una época como la que vamos a entrar, como es la Navidad, que por alguna razón los recuerdos nos invaden y las ofertas también, y se conjuga el “hambre con las ganas de comer”.


Además, si unimos a todo lo que les he contado con las impresionantes campañas de marketing que realizan las empresas de consumo, y las facilidades que te dan los bancos para financiar tus compras, esto ha levantado las barreras para gastar incentivando el consumo más allá de lo necesario.


Si además tenemos en cuenta, que los medios de comunicación, y ¡cómo no! Las redes sociales nos invitan a satisfacer nuestra necesidad de gasto, ya tenemos la fiesta en casa.
Aunque gastar genera satisfacción a corto plazo, puede llevar a consecuencias negativas, como endeudamiento, estrés financiero y dependencia emocional de las compras. Esto crea un ciclo en el que el gasto se convierte en una solución temporal a problemas más profundos


¿Pero cómo podemos retrotraernos a gastar de forma innecesaria?
Sería bueno ponernos un tope de gastos, ¡que siempre se sobrepasa! Pero por lo menos evitamos el gasto impulsivo y compulsivo.


En definitiva, no se es más feliz cuando más se gasta, podemos invertir nuestro tiempo de compras en compartir estas fiestas con los amigos y la familia, y buscar esos regalos que estén más a nuestro alcance, y en vez de regalar algo caro, regalar detalles que seguramente nos lo van a agradecer más, y, al final estaremos en paz, con nuestra cuenta de débito o cuenta corriente.


Gasta más, no te hace más feliz, prueba a gastar mejor.




Con afecto, y respeto.




todomotornews@gmail.com