• Se recomienda mantener el habitáculo entre 19 y 24
grados.
• Es aconsejable revisar el sistema de ventilación del
vehículo antes de iniciar el viaje.
• El coche de alquiler, alternativa para disfrutar de las
vacaciones de verano.
Conducir un coche en verano puede convertirse en
un infierno debido a las altas temperaturas que se alcanzan en su interior. La
temperatura recomendada para conducir se sitúa entre los 19 y los 24 grados,
por encima se produce somnolencia y fatiga y, por tanto, aumenta el riesgo de
sufrir un accidente.
El calor del motor, la tapicería, la ventilación
interior, el número de ocupantes y el color de la carrocería son factores que
influyen en la temperatura del habitáculo. Se calcula que en el interior de un
vehículo se pueden alcanzar hasta 15ºC más de temperatura que en el exterior,
lo que repercute negativamente en la capacidad de concentración y de reacción
del conductor.
Consejos Sixt para reducir los efectos del calor durante
la conducción
Sixt, empresa premium de alquiler de coches, propone
algunos consejos para reducir los efectos del calor durante la conducción en
verano:
