Es necesario prestar especial atención al estado del
parabrisas ante las bajas temperaturas y escasa visibilidad en esta época del
año.
Un impacto en el parabrisas puede convertirse en una grieta
irreparable, riesgo que se intensifica con los cambios bruscos de temperatura.
Descongelar el parabrisas con agua muy caliente, o con la
calefacción a temperatura elevada, puede dañarlo por el cambio brusco de
temperatura, provocando su rotura.
Para eliminar el hielo del parabrisas se recomienda el uso
de rasquetas o alcohol.
El parabrisas aporta hasta un 30% de la resistencia
estructural del vehículo, actúa como soporte de cámaras y sensores de
dispositivos de ayuda a la conducción, y es vital para el correcto
funcionamiento del airbag.