LA GOTA GORDA
En los últimos años, el sur de España ha experimentado un aumento significativo en las temperaturas, especialmente durante los meses de verano. Ciudades como Sevilla, Córdoba o Málaga han registrado récords históricos, superando los 45 °C en repetidas ocasiones. Este fenómeno no es aislado, sino que forma parte de una tendencia global conocida como cambio climático, cuyas consecuencias están empezando a sentirse con fuerza en regiones particularmente vulnerables al calor.
El cambio climático es el resultado del calentamiento global, provocado en gran parte por la actividad humana. La quema de combustibles fósiles, la deforestación, la agricultura intensiva y la emisión de gases de efecto invernadero han alterado el equilibrio natural de la atmósfera. Como consecuencia, el clima se vuelve más extremo, con olas de calor más frecuentes, sequías prolongadas y un aumento en la desertificación, especialmente preocupante en zonas como Andalucía.
Ante esta situación, surge una pregunta clave: ¿estamos ante un problema causado por el ser humano o es simplemente una fase más en la evolución natural del planeta? Si bien es cierto que el clima de la Tierra ha cambiado a lo largo de su historia, lo preocupante en este caso es la velocidad a la que se están produciendo estos cambios. La comunidad científica coincide en que el factor humano ha acelerado el proceso de forma alarmante.
Afortunadamente, aún estamos a tiempo de actuar. El ser humano puede contribuir a frenar el cambio climático adoptando medidas sostenibles: reducir el uso de combustibles fósiles, apostar por las energías renovables, promover la movilidad eléctrica, mejorar la eficiencia energética en edificios y apostar por un consumo responsable. A nivel individual, también podemos hacer pequeños gestos como reciclar, reducir el uso del coche privado o consumir productos locales.
En definitiva, si bien el clima siempre ha estado en constante cambio, la magnitud y rapidez actuales apuntan claramente a la acción humana como principal desencadenante. El futuro del planeta está en nuestras manos, y aún estamos a tiempo de cambiar el rumbo.
De momento, aquí en Sevilla no queda otra que “SUDAR LA GOTA GORDA”
Pepe Bejarano
todomotornews@gmail.com
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