LA ROTONDA

 

PLAN DE FUTURO

 

El envejecimiento demográfico, la concentración urbana desaforada, un horizonte de una vida en soledad, o los movimientos migratorios masivos, sin olvidarnos del calentamiento global.

Asistimos aterrorizados a cómo las grandes potencias mundiales han sacado sus cuchillos, para controlar los futuros recursos estratégicos.

Por norma general, el ser humano suele ser más pesimista con el paso de los años. El dar pasos atrás, o perder aquello que ha construido con los años, el gran vértigo por el que pasamos cuando pensamos en el futuro, por eso, nos instalamos en el presente si mirar hacia adelante, sin embargo, el futuro ya está aquí, y tiene el propósito de quedarse.

Estamos abocados a una insatisfacción social, las personas nos radicalizamos y miramos hacia adentro, lo que genera extremismos y tensiones sociales. El futuro depende de nosotros, aunque los grandes países del mundo se empecinen en ensuciar todo con sus luchas por el control mundial, poniendo en riesgo la seguridad del propio mundo.

Por lo que respecta a nuestro país, el futuro de España pasa por el Plan España2050,  un proyecto creado por la Oficina Nacional de Prospectiva y Estrategia para dirigir los esfuerzos de la nación hacia los posibles retos del futuro, aunque la prioridad es tener una mente flexible o adaptativa, y además capaz de actuar rápidamente, unida a una potente creatividad de ideas ante lo que está por llegar. 

El futuro es siempre tan incierto como impredecible. Por eso hay que adecuar de una manera gradual la realidad existente a las previsibles necesidades e intereses futuros de la población, ofreciendo soluciones alternativas que sean sobre todo efectivas. En última instancia, el objetivo es lograr que quienes vivimos en España miremos al futuro y que lo hagamos de una forma distinta a la que miramos el presente: con mayor audacia, con mayor vocación de acuerdo, y con mayor confianza en nosotros mismos. Somos capaces de conseguirlo.

Debemos conseguirlo. Se lo debemos a nuestros padres y a nuestros hijos.

Es evidente, que la sociedad actual está sacudida por una serie de inquietudes generalizadas. Aunque hay una multitud de problemas, a cada persona le afecta más, a algunos en particular, por tanto, lo sufren de forma diferente.

En una sociedad actual, donde los medios de comunicación tradicionales han perdido credibilidad y, en consecuencia, las redes sociales se han convertido en los medios recurrentes a las que todos nos asomamos con mayor confianza, aunque cuanta más información tenemos, peor impresión nos llevamos del mundo que nos rodea y del que tenemos por delante.

Al final, todos queremos vivir en paz, y ser feliz dentro de nuestras posibilidades. Dormir tranquilos por las noches y despertarnos de la misma manera cada mañana.

No debemos olvidar que las tecnologías son instrumentos a nuestro servicio, y su mayor utilidad es ayudarnos a evolucionar, haciéndonos cada vez más libres, no más esclavos ni dependientes.

La incertidumbre debe hacernos reflexionar, e intentar aportar nuestro grano de arena a la sociedad cada día, y diversificar todos nuestros esfuerzos en aquellos asuntos en los que podamos sumar, teniendo nuestros ojos muy abiertos, para que nadie nos diga cómo tenemos que vivir nuestra vida, y cómo podemos llegar a ser más felices.

Con afecto y respeto,

 

Pepe Bejarano

todomotornews@gmail.com