LA ROTONDA

 

COLORES

 

Me gustaría pintarles hoy un lienzo de palabras y frases, con temas que nos envuelven cada día. Y es que entre palabras y frases llegamos a construir párrafos que hacen que podamos entendernos entre unos y otros, pero si además abrimos la caja de los colores las emociones empiezan a brotar.

Me da igual si es pastel, acuarela, acrílico u óleo, me es indiferente, lo importante es que todo aquello que nos rodea pueda verse con un color, e incluso podamos verlo todos con los ojos de diario.

Me gusta descubrir un azul especial de mi cielo, para mí, es azul celeste, ese color que muy pocos llegan a conseguir mezclando colores hasta cinco, para darle realidad a un cielo sevillano que hace que resalten las espadañas que intentan acercarse a él, del mismo modo que el Giraldillo, veleta que culmina la torre por excelencia de mi ciudad salude al viento que acaricia la Giralda.

Hasta 34 azules podemos disfrutar que podemos de esta gama, entre ellos están: azul cobalto, azul marino, azul Prusia, azul océano, azul eléctrico, hasta 34 no está nada mal.

Pero, inmediatamente mi mirada se fija en el contraste del paisaje más cercano, los jardines y los árboles que impertérritos vigilan la plaza cercana, ahí puedo encontrar los matices del verde que cambia con la ayuda del sol que se cuela entre las ramas. El verde es el color característico de la vegetación y se puede definir por su semejanza a la coloración de las hojas de la hierba fresca. El verde, otro de los colores con los que se pueden pintar muchos objetos hermosos que hacen que la poesía tenga color, y por ende emoción: verde agua, verde esmeralda, verde turquesa, verde mar, verde pino, verde botella, todos ellos hacen especial nuestro paisaje.

Pero, si quieren, seguimos jugando, y podríamos seguir buscando texturas reales, aunque para gusto están los colores. En pintura, como en los géneros literarios, también podemos definir como titular nuestro estilo: narrativo, lírico, dramático, didáctico, en pintura: realismo, hiperrealismo, cubismo, puntillismo, surrealismo…

Terminemos este artículo con al arte pictórico que defendió magistralmente Salvador Dalí, el SURREALISMO.

Ya les describí mis primeras miradas del día, el cielo celeste y el verde pino de los jardines, ahora sí, percibo una paleta de colores en el ser humano, depende a quien me encuentre lo veo con un color determinado, algunos vienen ya dados: el butanero, naranja; el mecánico, azul; la abuelita que va abrigada con su carrito de la compra, le acompaña el color blanco; el conductor imprudente o que va haciendo estupideces con el coche, lleva el color negro; mi vecino impertinente, le alumbra el color rojo; y el individuo que saca al perrito sin bolsas, marrón.

Los colores son el otro lenguaje que vemos con otros ojos, aunque la miopía sea muy alta o la vista cansada, esté muy cansada de mirar la vida.

Todos nos despertamos cada mañana, después de haber soñado en blanco y negro, aunque son muchos los que ven en color con los ojos cerrados. Lo importante es que llenemos el lienzo de la vida del color que nos dicta nuestros sentimientos, y de todo aquello que nos rodea.

A la vuelta de la esquina, vamos a vivir de nuevo la estación del color, la primavera, algunos seguirán viendo la vida de color negro, los más optimista de color de rosa, otros se quedarán en blanco, los más osados pondrán verde a alguien y darán en el blanco. Otros, permanecerán en números rojos, se pondrán rojos cuando te miran a la cara, después de haberse puesto morados, aunque sean de sangre azul.

Gracias, por permitirme este pequeño juguete de frases y palabras de colores para dibujarles aquellos primeros contactos en mi vida.

Seguro que cada uno de nosotros podemos pintar un lienzo con nuestros colores preferidos, solo deje que los pinceles manchen de sentimientos sobre la tela blanca y empezarán a aparecer los colores de tu vida.

“El color es un medio para influir directamente en el alma”

(Wassily Kandisky)

 

 

Con afecto, respeto y color,

 

Pepe Bejarano

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