El fabricante alemán de
automóviles Opel, perteneciente al grupo estadounidense General Motors, dejará
de producir vehículos en 2016 en la planta de Bochum (Alemania), que cuenta con
una plantilla de unos 3.000 trabajadores.
La factoría de Bochum
produce actualmente el modelo Zafira, y dejará de fabricar vehículos al término
del ciclo de vida de este automóvil en 2016. Opel aseguró que se mantendrá el
almacén existente en las instalaciones y estudia asignar a la planta la
producción de un nuevo componente.
La compañía alemana no
precisa el número de empleados que se verán afectados por esta iniciativa,
enmarcada en un plan denominado 'Perspectiva Bochum 2022', si bien sostiene que
el objetivo es garantizar los puestos de trabajo existentes e incluso crear
nuevos empleos.
El vicepresidente de General
Motors y presidente del consejo de supervisión de Opel, Steve Girsky, indicó
que la empresa ha iniciado negociaciones con el comité de empresa al objeto de
evitar despidos forzosos antes del fin de la producción del actual Zafira.
Por su parte, el
viceconsejero delegado de Opel, Thomas Sedran, subrayó el compromiso de la
empresa con Alemania, donde cuenta con más de 20.000 trabajadores, y en
especial con Renania del Norte-Westafalia, donde dispone de 320 concesionarios
con 5.300 empleados.
La decisión de poner fin a
la producción de automóviles en Bochum se enmarca en el plan de
reestructuración 'Drive Opel 2022', que contempla, entre otros objetivos,
alcanzar el equilibrio en las cuentas a mediados de esta década, aumentar los
ingresos, reducir los costes, reforzar la imagen de marca y entrar en nuevos
mercados y segmentos.
Opel tiene previsto lanzar
23 nuevos modelos y 13 nuevos motores en el período comprendido entre los años
2012 y 2016.
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