LOS REYES DE LA CARRETERA
Me preguntaba un amigo
recientemente, “¿has puesto alguna vez el coche a 200 km/hora?” A lo que le
respondí: “tengo un controlador de velocidad puesto a 130, y en el momento que
llega a esa velocidad el sistema emite un sonido que te avisa”. Él me habló de
la sensación que se tiene cuando se conduce un coche de alta gama a alta velocidad,
“la verdad, Pepe, no se nota que vas a esa velocidad”. A lo que le respondí:
primero, no hay ninguna carretera en este país que te permita ir a esa
velocidad, segundo, es un delito, y tercero que si le gusta tanto la velocidad
que alquile un circuito, el de Jerez,
Alcalá del Río o la Palma del Condado, donde seguro puede desatar todas sus
pasiones con la velocidad. Así es, mi amigo es uno de tantos, que se creen, uno de "Los reyes de la carretera".