Las
principales asociaciones empresariales del sector del automóvil (Anfac,
Aniacam, Faconauto y Ganvam) han solicitado la renovación del Plan
PIVE de incentivos a la adquisición de vehículos eficientes, ante el inminente
agotamiento del presupuesto de 75 millones de euros con que se dotó el
programa.
A juicio de
estas asociaciones, el programa "es bueno para la sociedad y la economía
y, gracias al retorno fiscal, contribuye a luchar eficazmente contra el déficit
público". Por ello, el sector en pleno sostiene que un nuevo Plan PIVE
significaría "una inyección de confianza adicional para el consumo y un
apoyo significativo a la coyuntura económica más inmediata".
El ministro de
Industria, José Manuel Soria, ha indicado en repetidas ocasiones en las últimas
semanas su disposición a renovar el plan de ayudas a la compra, pero precisando
que no sabe si su departamente contará con fondos para poder hacerlo.
Las cuatro
organizaciones recuerdan en un comunicado conjunto que el Plan PIVE está
teniendo un impacto muy positivo en la economía y en la sociedad. "El Plan,
gestionado de forma eficaz por el IDAE con el apoyo de fabricantes y
concesionarios, está cosechando un rotundo éxito que ha provocado que los
fondos estén próximos a agotarse, con más de dos meses de antelación sobre la
fecha prevista", añaden.
Según las
patronales, el PIVE ha hecho posible alcanzar 700.000 matriculaciones en 2012,
mientras las redes de distribución han mejorado su situación, al aumentar el
tráfico en sus exposiciones un 60% entre los pasados meses de septiembre y
diciembre. También se ha roto la tendencia de destrucción de empleo.
"El Plan
PIVE --continúan-- puede ayudar de forma notable a mejorar el posicionamiento
de España como mercado eficiente y tecnológicamente avanzado". Las
organizaciones creen que todos los efectos positivos deberían mantenerse,
"puesto que se ha demostrado que el Plan genera crecimiento y
confianza".
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