NUESTROS HIJOS SON LOS MEJORES AL VOLANTE
En Europa pensamos que nuestros hijos son unos fenómenos al volante.
Y una cosa es lo que pensamos y otra la realidad. Cariño de padres,
sobreprotección, valoración dependiente de otro tipo de valores. La verdad, es
que las cifras nos dicen otra cosa:
-Hasta el
84% de los padres piensan que sus hijos no tienen conductas de riesgo ante el
volante, por el contrario, los accidentes de tráfico son la causa aislada más
importante de muerte en jóvenes de entre 15 y 24 años en Europa.
Este estudio llevado a cabo por la empresa de neumáticos,
Goodyear, también destaca al 39% de los padres que piensan que sus hijos no
saben conducir por:
-El
desconocimiento de las consecuencias de los accidentes (62%), el consumo de
drogas y alcohol (62%) y la falta de experiencia (49%)
Hablar de la educación de nuestros hijos en la
Seguridad Vial, es sumamente complejo, ya que, aquellos que nos siguen, saben cuál
nuestro parecer al respecto.
“Creemos que desde pequeñitos los jóvenes deben
ir creciendo en los aspectos de la educación en general y uno de esos aspectos,
sin duda, es la Seguridad Vial”
Claro que creemos en nuestros hijos, pero
cuantos de nosotros no ha dejado caer alguna vez esa famosísima frase
paternalista “si yo confió en ti, en quien no confió es en el que viene de frente”.
Estamos convencidos que nuestros hijos, no
corren con el coche, no beben antes de conducir y no se distraen mientras
hablan por teléfono al volante.
¡Claro! Después llegan las decepciones. Las frustraciones
y los momentos más trágicos de nuestra vida.
Solo podemos prevenir que nuestros hijos
comentan errores con educación, y muchas veces, tenemos que apelar a la diosa
fortuna. Es evidente que algunos piensan que la mejor manera de que aprendan es
que se equivoquen por ellos mismos, pero, en la conducción, temo disentir de
los que piensan así, porque AL VOLANTE,
HAY MUY POCO MARGEN DE ERROR PARA EQUIVOCARSE.
La psicóloga especialista en tráfico Margit Herle,
de Traffic Psychology International, apoya esta petición manifestando lo
siguiente: “Los padres, los profesores de autoescuela y todo el sistema social
en el que nos movemos, son responsables de enseñar a los jóvenes a conducir de
forma segura y responsable”.
Para PODER tenemos que QUERER.
Michael Levine |