Maserati e Hiroshi Fujiwara, padrino japonés de la cultura urbana, se unen en una colaboración que rompe las barreras geográficas y disciplinarias para llegar hasta los territorios inexplorados de la audacia, en un lugar en el que la música encarna la forma de un automóvil y donde romper las reglas está permitido. Así nace esta obra de arte dual, Operanera y Operabianca; dos voces que representan las dos evocaciones contrapuestas de esta Edición Especial del Maserati Ghibli y se presentan en exclusiva a nivel mundial en Tokio.