La función principal del sistema de frenado es ofrecer
una respuesta inmediata y optima en circunstancias de desaceleración o
emergencia.
El sistema de frenado de la mayoría de los vehículos se
apoya en las ruedas delanteras, equipados por frenos de discos que son más
resistentes y disipan mejor el calor, mientras que las ruedas traseras están
equipadas por frenos de tambor, no obstante, en la actualidad cada vez más
modelos de vehículos tienen el sistema de frenos de discos en ambos ejes.
El sistema de frenado de discos se compone de:
Pastillas de freno: es la pieza que sufre el mayor
desgaste por que asume casi el 80% de la potencia que se debe ejercer para
frenar el vehículo.