lunes, 24 de julio de 2023
domingo, 23 de julio de 2023
TODOMOTOR VIAJE
Existen muchos parques
botánicos destacados en todo el mundo, pero a continuación te mencionaré tres
de los más importantes y reconocidos:
Jardín Botánico Real de Kew
(Reino Unido): Situado en Londres, el Jardín Botánico Real de Kew es uno de los
parques botánicos más famosos del mundo. Fue fundado en 1759 y cuenta con una
extensa colección de plantas de todo el planeta. En sus 132 hectáreas alberga
invernaderos impresionantes, como el famoso Palm House y el Princess of Wales
Conservatory. Kew también es reconocido por su dedicación a la conservación y
la investigación científica.
Jardín Botánico de Singapur
(Singapur): Ubicado en el corazón de la ciudad de Singapur, el Jardín Botánico
de Singapur es otro parque botánico de renombre mundial. Fundado en 1859, es
uno de los jardines más antiguos de su tipo. Es conocido por su colección de
orquídeas, que incluye una variedad de especies y híbridos. El Jardín Botánico
de Singapur también ha sido reconocido por su trabajo en la conservación y la
investigación, así como por su hermoso entorno natural.
Jardín Botánico de Río de
Janeiro (Brasil): El Jardín Botánico de Río de Janeiro, ubicado en la ciudad de
Río de Janeiro, Brasil, es otro parque botánico destacado. Fundado en 1808,
cuenta con una extensa colección de plantas tropicales y subtropicales,
incluyendo especies raras y en peligro de extinción. Su principal atracción es
el "Invernadero de las Orquídeas", una estructura de vidrio que
alberga una amplia variedad de orquídeas. El jardín botánico también se destaca
por su belleza escénica y su importancia histórica.
Estos tres parques botánicos
son solo ejemplos de la gran cantidad de espacios naturales de este tipo que
existen en todo el mundo. Cada uno de ellos ofrece una experiencia única y
valiosa para los amantes de las plantas y la naturaleza en general.
sábado, 22 de julio de 2023
LA ROTONDA
CODICIA INTERNACIONAL
En el contexto de las
relaciones internacionales, la codicia entre países puede manifestarse de
diversas formas. Una de ellas es la competencia por recursos naturales, como el
petróleo, el gas, los minerales o el agua. Los países pueden codiciar estos
recursos para satisfacer sus propias necesidades internas o para obtener una
ventaja económica o política sobre otros.