Ruedas, amortiguadores,
asientos o puertas se ponen a prueba de forma extrema antes de que un coche
salga al mercado
Estos tests sirven para
comprobar la resistencia de todas las piezas, la seguridad del vehículo o el
aislamiento del chasis
Las pruebas con prototipos
estudian también el desgaste de los materiales en los climas más adversos