sábado, 23 de enero de 2016
LA ROTONDA
EL
QUE LA HAGA QUE LA PAGUE
El pasado año
saltaba la noticia, algunos vehículos de
Volkswagen estaban contaminado el medio ambiente. Un supuesto software adaptado
a los vehículos estaba engañando la realidad de emisiones de los vehículos
diésel. Ahora, hay un nuevo revuelo en Francia con Renault, la marca francesa
está en boca de todo el mundo, después que varios agentes de la Comisión de la
Competencia y el Fraude entraron en las oficinas de la compañía en París para
recabar información específica después de que se revelaran altos niveles de
contaminación en dos de sus modelos, el Espace y el Captur. Esas irregularidades
motivaron la intervención de las sedes, si bien los resultados no permitieron
constatar que se hubiera cometido fraude.
El que suscribe,
tiene la obligación moral y profesional de informar siempre que se produzca una
noticia. Pero, ¡ojo! antes de lanzar a los cuatro vientos esa noticia, el que
suscribe, tiene la obligación, de cerciorarse de que lo que va a contar es
verdad. Claro está, todo lo que se ha contado hasta el momento es cierto, pero
aún no se ha demostrado nada. Y esa verdad, que le estamos contando, puede
hacer un daño de incalculable dimensiones a una empresa o personas, que todavía
no han pasado los filtros de la justicia.
En el caso Renault,
la compañía francesa llamará a revisión a 15.000 vehículos en Francia para
ajustar sus motores, tal y como anunció la ministra de Medio Ambiente gala,
Ségolène Royal. Tras una reunión celebrada en el ministerio, los representantes
de la empresa "se han comprometido a revisar 15.000 automóviles para
regular y verificar que sus sistemas de filtración de emisiones que funcionan
de manera correcta", según ha
declarado Royal en la emisora de radio RTL.
Si es verdad que
los 15.000 vehículos cumplen con las disposiciones legales para poder circular,
¿Se imaginan el daño que se le ha podido ocasionar a esta empresa?
Ahora bien, creemos
que no solo en Francia, sino en todos los países donde existan fábricas de
vehículos deberían pasar una serie de inspecciones aleatorias para que no se
den este tipo de situaciones. (Además de
las técnico burocráticas que ya
existen).
Inspecciones como
pasamos aquí en España todos los mortales que tenemos vehículos, en las ITV que
intentan salvaguarda la circulación de vehículos que no se encuentran en
condiciones técnicas para el tránsito de los mismos por las vía públicas. Pues
tanto de los mismo, para los vehículos recién nacidos y de forma aleatoria por
la institución competente para tal fin. Y de esta forma, acabaríamos con tantos
“dimes y diretes”, y lo que es más importante, a estas alturas de la película
salvaguardaríamos las imagen, y las arcas de las marcas de estos vehículos, a
los que se les está involucrando en este tipo de fraude.
Ahora bien, si en
las inspecciones previas, por parte del estado, se encuentra alguna anomalía en
los vehículos inspeccionados, que se publique y se demande a los infractores.
Si estos vehículos
no están en condiciones para circular, al igual que nos ocurre a todos cuando
pasamos la I.T.V., no podremos circular hasta que no se solucione el problema.
Así de fácil, EL QUE LA HAGA QUE LA PAGUE.
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