En 1974, cuando Porsche presentó su primer deportivo de serie con motor turbo, el mundo del automóvil cambió súbitamente. A lo largo de 50 años, el término Turbo ha experimentado una apasionante transformación, desde la tecnología en sentido clásico hasta el look Turbo, con su gran ensanchamiento y su amplio alerón trasero. Ahora, esta denominación identifica a la versión superior en cada modelo de la gama, incluidos los eléctricos.
Aunque el término no está presente en el nombre del coche, la sobrealimentación ha seguido implementándose en modelos como el 911 GT2 y en otros más recientes, el 718 y el 911 Carrera.
Nº 1 El Big Bang: la tecnología