La seguridad
de nuestros hijos
Creo que es
ley de vida pensar que el porvenir de los más “peques” de la casa está por
encima de todo en nuestra vida. Por lo menos así lo siento yo. Desde que nacen,
verlos crecer y ponerlos en la línea de salida de la vida es todo una
responsabilidad y un reto para los padres y madres. Por eso nos importa tanto
su seguridad, su bienestar y que sigan ilusionados y felices el mayor tiempo
posible.
La escuela
es sin duda, el ir y venir del conocimiento, donde van formando su personalidad
y van socializándose, en clase, el recreo y el camino a casa y de casa a la
escuela.
Ayer
precisamente, finalizó una campaña que ha puesto en marcha la DGT sobre EL
TRANSPORTE ESCOLAR, donde se han comprobado autorizaciones y documentos tanto
del vehículo como del conductor, elementos de seguridad, tiempos de conducción
y descanso, velocidad, alcohol/ drogas…
Cada día,
medio millón de alumnos utiliza el autobús escolar para ir al colegio y volver
a casa, un medio de transporte seguro,
tal y como muestran las cifras de siniestralidad vial (el año pasado no se
produjo ninguna víctima mortal entre los usuarios de este tipo de vehículos)
pero que debido a la vulnerabilidad de sus pasajeros y a las vías por las que
suele circular, en su mayoría carreteras convencionales, necesita de una
especial vigilancia.
EL CINTURÓN
DE SEGURIDAD: UN SALVAVIDAS
En 2014, los
autobuses escolares se vieron implicados en 29 accidentes (20 en vías interurbanas
y 9 en urbanas), en los que no falleció ninguna persona aunque 11 ocupantes
resultaron heridos y 3 de ellos requirieron hospitalización.
Por la
importancia que tiene este dispositivo de seguridad en caso de accidente, se ha
prestado especial atención al uso del cinturón de seguridad en aquellos
autobuses escolares que los tengan instalados, actualmente ese porcentaje es de
más de un 60%.
Según
diversos estudios el uso de un sistema de seguridad en autobuses reduciría las
lesiones mortales en un 90% en caso de choque frontal o vuelco, ya que
correctamente abrochado evita la proyección del pasajero (adulto o niño) y
reduce los impactos en el pecho, abdomen y piernas.
Desde
octubre de 2007 se deniega la matriculación a cualquier autobús que no lleve instalados
estos sistemas de retención.
EDUCANDO EN
EL BUS ESCOLAR
Los
trayectos de casa al cole pueden ser buenos momentos para que el adulto que
acompaña a los menores les recuerde algunos mensajes sobre seguridad vial,
tales como:
• No pararse nunca detrás del autobús.
• Esperar la señal del conductor y cruzar
siempre al menos tres metros por delante.
• Dentro del autobús, mantenerse sentado
y con el cinturón puesto, si éste lo lleva instalado.
• No correr al llegar al autobús, ni al
salir.
• Obedecer al conductor y al monitor.
Además los
padres deben comprobar la seguridad de los autocares en los que se desplazan
sus hijos, solicitar al centro la contratación de autocares con cinturones y
comprobar que un monitor acompaña a los niños durante el trayecto.
OTRAS FORMAS
MÁS SALUDABLES DE IR AL COLE
Además del
bus escolar hay otros medios de transporte en los que los alumnos se desplazan
para ir al colegio: coche privado, transporte público, bici o simplemente
andando.
Con la
intención de promover la movilidad sostenible desde edades tempranas la DGT en
colaboración con la Federación de Municipios y Provincias está fomentando e
incentivando los caminos escalares seguros, caminos que favorezcan y estimulen
el desplazamiento a pie, en bici o en transporte público en la ida y vuelta al
colegio.
CONSEJOS
DIRIGIDOS A LOS NIÑOS
El RACE
propone una serie de recomendaciones para que durante el recorrido en
transporte escolar, la subida y la bajada al vehículo, y la circulación en sus
inmediaciones sea lo más segura posible. Además, con estos consejos, estaremos
concienciando a los más pequeños sobre las prácticas más seguras, ya sea como
peatón o como pasajero de un vehículo .
Al ir a la
parada …
- Llegar
siempre a la parada del autobús al menos cinco minutos antes de la hora a la
que prevista de llegada del autobús. Y si lo pierde, no se preocupe, mejor
llegar tarde que correr junto al autobús para que se detenga. Tenga el teléfono
móvil del acompañante, para que en caso de problema le esperen.
- Si hay que
cruzar la calle por delante del autobús, caminar siempre por la acera, y si no
hay acera, caminar a lo largo del borde de la carretera, hasta llegar a un
punto que esté, como mínimo, a una distancia de al menos 3 metros por delante
del autobús, asegurándose de que el conductor localiza al peatón antes de
cruzar.
- Cuando se
vaya a cruzar hay que mirar siempre a la izquierda, luego a la derecha y luego
a la izquierda otra vez. Los coches vienen primero por la izquierda. Si hay
coches aparcados que no te dejan ver, ve al paso de peatones de la esquina más
próxima.
- Como regla
general, al cruzar siempre hay que asegurarse de que el conductor ve al peatón,
no debiendo cruzar hasta que éste se ha detenido por completo. En el caso de un
autocar, hay que seguir las indicaciones del conductor.
Al subir o
bajar del autocar
- Cuando se
acerca el autobús hay que mantenerse siempre alejado a unos 2 metros de
distancia de él, y dejar que el autobús se acerque hasta la acera para que
evitar tener que bajar de ella.
- No empujar
a otros niños para subir el primero, no correr al subir o bajar del autobús.
- Esperar
hasta que el autobús se pare, la puerta se abra y el conductor o la persona
encargada dé su visto bueno para entrar o salir del autobús.
- Nunca
caminar por detrás del autobús porque el conductor no podrá verte. Es una
situación de especial peligro.
- Al subir o
al bajar, utilizar los agarres para evitar caídas. Cuando se baje del autobús,
tener cuidado de que la ropa con colgantes y las mochilas o bolsas escolares no
se enganchen en los pasamanos o con las puertas del autobús.
- Caminar
siempre al menos a dos metros de distancia de los laterales del autobús.
- Un momento
de riesgo es cuando los niños llevan juguetes, estuches... y se caen cerca del
autobús. Si esto sucede, NUNCA recogerlo del suelo. Indicar al conductor o al
acompañante la situación, y recogerlo con la máxima precaución. Nunca recogerlo
tú mismo porque el conductor podría no verte al poner el autobús en movimiento.
- Cuando se
sube al vehículo, hay que sentarse en la plaza rápidamente. - Si al salir
tienes que cruzar la calle por delante del autobús, camina por la acera o por
el borde de la carretera hasta un punto que esté al menos tres metros por
delante del autobús (cinco pasos grades) antes de cruzar. Asegúrate de que el
conductor del autobús puede verte y de que tú le ves a él para seguir sus
indicaciones.
Dentro del
autobús
- Hay que
quedarse sentado en el asiento hasta que finalice el trayecto.
- Dentro del
autobús no hay que gritar ni alborotar. Deja que el conductor se concentre en
su trabajo.
CONSEJOS A
LOS PADRES
Los niños
deben aprender a comportarse con seguridad en todo momento: como peatones, en
nuestro vehículo, en bicicleta, o cuando suben y bajan del autobús o viajan en
él. Deben hacer siempre caso a los responsables, conductor y acompañante, y
recordarles que deben actuar correctamente en todo momento, por él y por el
resto de ocupantes.
Hay que
evitar que los niños lleven objetos sueltos, debiendo meter todos sus
utensilios en su mochila para que no se les caigan las cosas por el camino ni
cuando están cerca del autobús. Andar con prisas puede ser peligroso porque nos
hace olvidar las medidas de precaución básicas. Y evitar distracciones, como
llevar la mascota a la parada, para centrarnos en la operación de subida y
bajada.
Nuestro
ejemplo es importante durante el trayecto a la parada. Si hay que cruzar,
hágalo por los pasos para peatones y respetando los semáforos, sirviendo de
ejemplo para los pequeños: mirar antes de cruzar, primero a la izquierda, luego
a la derecha y de nuevo a la izquierda, asegurándonos de que no viene ningún
coche.
Si espera a
su hijo con el coche a la parada, no lo aparque en el lado contrario al del
autobús, pues le obligará a cruzar la calle, lo que implica un riesgo por el
tráfico y por las zonas “ciegas” del autobús. Espere en el mismo lado de la
calle en que lo hará el autobús.
CONSEJOS
PARA LOS CENTROS ESCOLARES Y EMPRESAS DE AUTOCARES
Los centros
escolares deben involucrarse activamente en los temas de seguridad vial,
incluyendo los caminos escolares seguros y el transporte escolar como parte de
la concienciación de los más pequeños en materia de movilidad segura y tráfico.
- Aprovechar
el propio autobús escolar para dar la educación vial mientras dura el trayecto,
ya que así el alumno será más receptivo al impartir educación vial en un
contexto distinto y por lo tanto novedoso, y además el alumno podrá ver la
aplicación de lo que se le trata de transmitir de una forma más inmediata y
directa.
- Cuidar la
seguridad en el trayecto casa - colegio: la educación vial impartida en los
colegios no debe limitarse al interior de las aulas, sino que debe preocuparse
de los alumnos una vez que abandonan las aulas.
- Pedir la
colaboración de las policías locales para proteger a los pequeños en su
trayectos casa -colegio, evitando riesgos.
- Establecer
medidas de seguridad en la parada del autobús escolar en el colegio, evitando
vehículos en la zona, y con señalizaciones que posibiliten el cruce de dicha
vía por los alumnos con las debidas condiciones de seguridad.
Actualmente
hay 106 municipios de 35 provincias y 300 centros escolares que están trabajando o que ya cuentan con caminos
escolares seguros.
Cada vez
estoy más de acuerdo con las campañas de vigilancia y concienciación que
realiza la DGT de forma sistemática para que recordemos que nuestra vida está
en juego en la carretera y que tenemos que atender a todas las normas que existen
para que nos sintamos más seguros y no pongamos en riesgo la vida de los demás.
Mi
enhorabuena de nuevo para la Dirección General de Tráfico, que demuestran cada
día con estas iniciativas que sí, somos un país moderno y preparado.
Gracias por
todo y por la seguridad de nuestros hijos.