PRIMAVERAL
Pasamos del rezo cantado de
una saeta desde un balcón, o desde el suelo, mientras un misterio, o un palio,
pasa por delante del saetero, y del recogimiento de un rezo cantado, pasamos a
la manifestación más alegre que se pueda dar en una ciudad: Todo se convierte
en alegría, color, música, olor, los sentidos se han amplificado, y el ambiente
estalla en una explosión de alborozo.